El técnico del City es sinónimo de éxito, su trayectoria como entrenador – más allá de los títulos conseguidos – es fiel reflejo de la excelencia competitiva. Ha dirigido grandes equipos, con los mejores jugadores del mundo y grandes inversiones en fichajes, pero los sus equipos siempre han ido hasta el final. Si no han ganado, se han quedado muy cerca. Con Guardiola siempre se va hasta el final y eso marca el tremendo nivel de un entrenador que lleva más de quince años al máximo nivel de exigencia.

Tras la derrota en Anfield, dos a cero contra el Liverpool siendo los de Guardiola inferiores, lo nunca visto. Por vez primera, siete partidos oficiales consecutivos sin ganar y todo ello pese a ser renovado recientemente. Se anunciaba cambio de ciclo, Txiki Beguiristain hizo oficial que dejaba su cargo de director deportivo al acabar la presente temporada y se esperaba que tras él fuese Guardiola, pero este renovó cambiando el paso para seguir liderando, ahora de su inseparable Txiki, el proyecto del City.

En la Premier, once puntos por debajo del Liverpool. Título perdido salvo desplome de los “reds” y apagón de Arsenal y Chelsea. El Brighton también está por delante y el Tottenham llega por detrás para incordiar a un City que está fuera de las posiciones de Champions. La lesión de Rodri ha tumbado a Guardiola, sin un mediocentro diferencial su modelo de juego pierde balance y rendimiento colectivo.