18h07 CEST
18/09/2025
Madrid, 18 sep (EFE).- Ni siquiera la mala fortuna del 1-0 basta como excusa para la salida del Atlético de Madrid en Anfield, con dos goles en contra en los primeros cinco minutos y 34 segundos, como tampoco la reacción posterior disimula un problema defensivo insistente en la Liga de Campeones, más allá de nombres e individualidades, lejos del equipo que cada edición se sentía un aspirante al título europeo hace poco más de un lustro.
De sus últimos 50 partidos de Champions, el equipo de Diego Simeone, antes un seguro defensivo, tan solo ha sostenido su portería a cero en diez de ellos. Nada más un 20 por ciento.
Lo logró, por orden inverso, contra el Real Madrid (1-0) y el Sparta Praga (0-6), en 2024-25; el Celtic (6-0) y el Lazio (2-0), en 2023-24; el Brujas (0-0), en 2022-23; el Manchester City (0-0), el Manchester United (0-1) y el Oporto (0-0), en 2021-22; y el Liverpool (1-0) y el Lokomotiv Moscú (2-0), en 2020-21. Ocho fueron en el Metropolitano y dos como visitante.
En ese recorrido por los últimos 50 choques en la máxima competición continental, con un balance de 22 triunfos, 10 empates y 18 derrotas, encajó 61 goles. Una media de más de un gol por encuentro, tan anómala en la primera parte de la era Simeone. A la vez, anotó 73 tantos en la portería contraria. Son apenas doce más de los que recibió.
Sólo cuatro de sus partidos imbatido corresponden a los 20 más recientes en este torneo, en el que el Atlético no va más allá de los cuartos de final desde 2016-17, la última vez que jugó las semifinales, y en el que ha encajado dos o más goles en 18 de esos 50 encuentros. En tres de los once últimos recibió tres o más goles: el 3-2 con el Liverpool de este miércoles y el 4-0 con el Benfica y el 1-3 con el Lille de la pasada temporada.
Ni al inicio ni al final
Un rebote fatal en el 1-0 entre Andy Robertson, en el minuto tres y medio, y una pared de Mohamed Salah con Ryabn Gravenberch, en el 2-0 a los cinco minutos y 34 segundos, pusieron en evidencia el comienzo del encuentro del equipo rojiblanco en Anfield. Lo condicionaron todo. Pero la cantidad de ocasiones del Liverpool no se limitó solo a esa franja, sino que fue mucho más constante. En cuanto empató el Atlético, lo asedió de nuevo y lo ganó.
“Un golazo de Virgil (Van Dijk), impresionante, nos deja con el sabor amargo de perder el partido, pero con el espíritu que hay que tener para jugar en el Atlético de Madrid”, expresó Diego Simeone, cuyo equipo recibió el 3-2 en una acción de manual, recurrente, del Liverpool, con el golpeo de córner de Dominik Szoboszlai y el cabezazo de Van Dijk, al que el conjunto 'red' busca en cada saque de esquina para el remate.
Sin ir más lejos, el pasado abril, en plena competencia por la Premier League, recién empatado en Anfield por el West Ham (el 1-1 del equipo londinense fue en el minuto 86), el Liverpool venció el encuentro de la misma manera que este miércoles. El lanzador entonces fue Alexis Mac Allister. El rematador fue de nuevo Virgil Van Dijk.
El 3-2 arruinó la reacción del Atlético, más aparente que concluyente, más allá de la pegada de Marcos Llorente para reducir las diferencias en la primera parte, al borde del descanso, y empatar el duelo en el minuto 81. El partido duró diecisiete minutos más, hasta el 96, en los que el Liverpool finalmente se impuso por insistencia e intensidad. El doble de remates del Liverpool
El conjunto inglés dobló al Atlético en intentos de remate, según las estadísticas oficiales de la UEFA. De los 20 locales (9 en el primer tiempo y 11 en el segundo) a los 10 visitantes (4 en la primera y 6 en la segunda), aunque la diferencia se redujo en los que alcanzaron a portería (6 del equipo británico y 4 del español), sin contar el derechazo al poste dentro del área, con todo a favor, de Mohamed Salah todavía con el 2-1 en el marcador.
Igualada la posesión en la primera parte, al contrario que el resultado y las oportunidades, la segunda fue del Liverpool, con un 61 por ciento por el 39 del Atlético, especialmente en los últimos 17 minutos que pasaron del 2-2 al 3-2 final, cuando arrinconó al conjunto madrileño hasta el gol de cabeza de Virgil Van Dijk en el minuto 92.
En los 59 últimos partidos en Anfield del Liverpool, hasta nueve equipos (el Bournemouth, esta misma campaña; el Arsenal, el Manchester United y el Arsenal, la pasada; y el Newcastle, el Norwich, el Tottenham y el Atalanta, en 2023-24, aparte del Atlético) marcaron dos o más goles en ese estadio, aunque sólo ganó uno de ellos, el equipo italiano, porque también fue capaz de sostener su marco a cero: 0-3 en la Liga Europa hace dos años.
Iñaki Dufour