Madrid, 17 sep (EFE).- Kylian Mbappé firma registros solo conseguidos por grandes goleadores de la historia del Real Madrid. 50 goles en 64 partidos de blanco, seis en cinco este curso en el que necesita socios que aporten gol. Apenas dos tantos de Vinícius y de Arda Güler es el balance. Xabi Alonso busca goleadores mientras intenta frenar las expulsiones y se enfrenta al primer problema por lesiones.

De los diez goles marcados por el Real Madrid en sus cinco partidos, seis llevan la firma de Mbappé en lo que comienza a convertirse en una dependencia del astro francés. Es un paso en liderazgo que siempre se le reclamó a Kylian y que ha dado tanto dentro como fuera del campo.

Pero su racha goleadora, marcando a Osasuna, dos al Oviedo, a la Real Sociedad y doblete en el estreno en la Liga de Campeones al Olympique de Marsella, no se ha visto acompañada por ningún tanto de jugadores que han tenido oportunidades como Franco Mastantuono, Rodrygo Goes y Brahim Díaz.

Tampoco aportación de ningún centrocampista que sea Güler en un nuevo rol. Añorando la figura de Jude Bellingham, aún sin minutos tras operarse un hombro, con bajón en el rendimiento de Fede Valverde, que pisa menos área y chuta menos desde fuera de ella.

Mientras Xabi Alonso va encontrando la fórmula con la que mejorar el juego, ante el Marsella dejó la mejor primera parte en una exhibición de presión alta, robo y el 'rock and roll' que tanto gusta al Bernabéu, con hasta doce disparos al portero rival en 45 minutos, el técnico tolosarra, rendido a la inspiración de Mbappé, prueba variantes en el tridente en pos de aumentar el rendimiento goleador de su equipo (2 tantos de media por encuentro, 10 goles en 43 disparos a portería rival).

Con dos penaltis de Mbappé, con los que por si había alguna duda zanjó definitivamente el debate que existía del lanzador con Carlo Ancelotti, y el acierto de Thibaut Courtois en la portería, cortaron la que era peor racha del Real Madrid en la Liga de Campeones, sumando todos los años en los que se denominó Copa de Europa.

En tres ocasiones había perdido tres partidos consecutivos y el Marsella tuvo en sus manos provocar un registro histórico. El Real Madrid cayó la pasada edición en la vuelta de octavos de final, ante el Atlético de Madrid en el Metropolitano pese a acabar pasando la eliminatoria con la polémica tanda de penaltis, y en el doble enfrentamiento ante el Arsenal de cuartos.

Cuatro expulsiones en once partidos de Xabi

Entre el Mundial de Clubes, el arranque de LaLiga y el primer partido de 'Champions', el balance que presenta el Real Madrid en tarjetas rojas recibidas es preocupante. Hasta cuatro en once encuentros. Raúl Asencio cometió un grave error ante el Pachuca, midiendo mal y cayendo en la trampa de Salomón Rondón.

Dean Huijsen cometió un penalti inocente en el tiempo añadido de un partido sentenciado ante el Borussia Dortmund, en una acción sobre Guirassy que le impidió jugar ante el París Saint-Germain en una de las causas de la goleada que eliminó al Real Madrid del Mundial. El central internacional español fue, tras las vacaciones, el primer expulsado del nuevo curso por un agarrón sobre Mikel Oyarzabal en Anoeta.

Y Dani Carvajal, en una acción impropia de su experiencia y con el brazalete de capitán del Real Madrid, propició un cabezazo a un rival dejando al Real Madrid por segundo partido consecutivo en inferioridad numérica ante el Marsella. Solventó ambos partidos el equipo blanco a costa de un sobreesfuerzo en sus jugadores en semanas ya con tres partidos que aumentan el desgaste.

El problema que se le presenta a Xabi Alonso es doble. El primero, la cantidad de tarjetas recibidas, lo comenzará a tratar el jueves en el regreso a los entrenamientos. El segundo aparecerá en la Liga de Campeones, donde la rotura muscular de Trent Alexander-Arnold y la sanción de dos partidos que podría caer sobre Carvajal, le deja sin sus dos laterales derechos.

Es una situación inesperada que sufrió Carlo Ancelotti y condicionó su último año. El club buscó soluciones, centrando los fichajes en la línea defensiva con la llegada de Tren, Huijsen y Álvaro Carreras. La hereda de forma inesperada Xabi Alonso que tendrá en LaLiga a Carvajal y debe inventar algo para medirse al Kairat Almaty y el Juventus en las dos próximas jornadas de 'Champions'.

El primer mensaje, muy directo, lo pudo escuchar en la zona mixta del Bernabéu en palabras de uno de sus capitanes, Fede Valverde, que no desea regresar al lateral y quiere continuidad en el centro del campo.

"He tenido muchas conversaciones con el entrenador y él sabe lo que yo realmente quiero. Merezco seguir teniendo oportunidades en mi posición. He disputado con los mejores jugadores del mundo y he sacado mi lugarcito para ser hoy uno de los pilares del medio del campo del Madrid. El entrenador sabe que no me gusta mucho jugar de lateral, creo que eso ya lo tiene muy convencido. Pero siempre estoy a disposición del equipo", afirmó.

De esta manera y si Xabi Alonso no convence a Fede para que regrese al lateral y deje hueco en el centro del campo para la inclusión de Jude Bellingham o Eduardo Camavinga, ya en condiciones ambos para reaparecer, el técnico tiene la opción de mover a Raúl Asencio a banda o tirar de cantera.

Roberto Morales