Barcelona, 3 nov (EFE).- El Espanyol frenó su racha de dos victorias (Oviedo, 0-2, y Elche, 1-0) al perder contra el Alavés en Mendizorroza (2-1), un nuevo traspié del cuadro blanquiazul a domicilio, asignatura pendiente de los pupilos del entrenador Manolo González esta temporada pese a su buena imagen fuera.

El conjunto periquito únicamente ha sumado cinco puntos como visitante de los trece que atesora actualmente en la clasificación. Los catalanes han firmado una victoria lejos del RCDE Stadium, contra el Oviedo, dos empates y dos derrotas. Fuera de casa han recibido más goles (seis) de los que han marcado (cinco).

El Espanyol, en la 2024-25, sufrió a domicilio, con tres victorias en total. Las sensaciones, en cualquier caso, son ahora radicalmente distintas por juego y resultados. Los blanquiazules, pese a este tropiezo, son sextos y suman 18 puntos, casi la mitad de los 42 que habitualmente se asocian a la permanencia.

Lejos del RCDE Stadium, además, la imagen del equipo periquito ha sido, en líneas generales, positiva. Antes de Mendizorroza, los de Manolo González empataron contra la Real Sociedad (2-2), perdieron en el Bernabéu ante el Madrid (2-0), se repartieron los puntos con el Girona (0-0) y ganaron al Oviedo (0-2).

Desgranando las cifras, vemos que el único traspiés al margen del último choque contra el Alavés fue contra el Real Madrid, actual líder de la competición. El conjunto blanco se ha mostrado intratable en su estadio y no ha cedido ningún punto hasta ahora, encajado sólo tres goles.

El vestuario catalán no enciende, ni mucho menos, las alarmas. "Hay baches en el camino, pero tenemos que seguir. Ahora tenemos que hacernos fuertes en casa (sábado, contra el Villarreal). Toca seguir luchando. Me quedo con que el equipo luchó hasta el final", explicó el delantero Roberto Fernández en declaraciones al club.

Su compañero, el centrocampista Edu Expósito, consideró que deben seguir "en esta línea", especialmente por la actitud mostrada en la segunda parte contra el Alavés al intentar remontar el 2-0 inicial. El futbolista auguró un "partidazo" frente al cuadro amarillo: "Será complicado, pero jugamos con nuestra gente".