Madrid, 24 jun (EFE).- Resguardado en un triple empate en el grupo B que lo perjudicó, en decisiones arbitrales discutibles e incluso en la mala fortuna por momentos, el Atlético de Madrid se va del Mundial de Clubes fuera de las eliminatorias, distante de los objetivos económicos y deportivos que se marcó, más allá incluso de una decepción evidente.

No ha pasado la fase de grupos el Atlético, que se proponía como mínimo ir a octavos de final o más allá, a cuartos, a semifinales, incluso a la final, dependiendo de la voz que dicte el desafío, condicionado desde la primera jornada por el 4-0 en contra con el París Saint Germain, del que intentó sobreponerse con dos triunfos que no fueron suficientes.

El revés deportivo es indiscutible. Sin títulos ni en LaLiga ni en la Liga de Campeones ni en la Copa del Rey en esta temporada, descartado de todos ellos a principios de abril entre todas las expectativas que generó hasta entonces, el Atlético agarró sus ilusiones al atractivo y novedoso Mundial de Estados Unidos. Un aliciente para la recomposición, la reacción y la reivindicación a ojos de todo el mundo que no ha sido tal realmente.

En el grupo más complejo, con los ganadores vigentes de la Liga de Campeones y la Copa Libertadores, el Atlético falló desde el primer plan ante el París Saint Germain, cuando todo lo probado durante la preparación se quedó en nada sobre el césped del Rose Bowl, a merced de la capacidad de Vitinha, Desiré Doue, Kvicha Kvaratskhelia y compañía.

Ni presionó ni manejó el balón ni recuperó a la pérdida con la celeridad y la intensidad que ensayó, ni presentó la ambición esperada en toda la primera parte, como había diseñado sobre el tapete de los entrenamientos. Y encajó dos goles. Su mejora en la segunda tampoco surtió efecto: dos goles más tras la expulsión por doble tarjeta amarilla de Clement Lenglet, bajo el calor y entre el esfuerzo de aquel 15 de junio en Pasadena.

Un 2-0 con el PSG también lo eliminaba

“Nos ha penalizado mucho el partido de París, jugar con uno menos, al final con el calor que hacía, siendo el primer partido… Al final, estábamos muy cansados, dejamos muchos espacios y el París nos hizo goles”, expresó Marcos Llorente, titular los tres partidos, como el portero Jan Oblak, los defensas Robin Le Normand y Javi Galán, los medios Pablo Barrios y Rodrigo de Paul, el extremo Giuliano Simeone y el delantero Julián Alvarez. Antoine Griezmann, Samuel Lino, Koke Resurrección, José María Giménez y Conor Gallagher empezaron uno. Clement Lenglet y Alexander Sorloth salieron de inicio en dos.

El 4-0 fue el principio del fin para el Atlético, pero, realmente, sin esos dos goles finales también estaría hoy eliminado de los octavos con el mismo triple empate del grupo B.

Sin esos dos tantos en contra, a los que apelaron varios de sus jugadores tras la eliminación, su diferencia de goles habría sido de -1. Tampoco le habría servido: el Botafogo tiene 0 y el PSG + 1. Nadie en el torneo se quedará fuera con 6 puntos salvo el Atlético, pero tampoco le habría bastado un simple 2-0 con el ganador de la ‘Champions’ en la primera cita de la competición.

Vencedor después ante el Seattle Sounders con dos goleadores inesperados (Pablo Barrios, con un doblete; Axel Witsel, con un tanto) y ganador por el insuficiente 1-0 ante el Botafogo, con la diana de Antoine Griezmann (reencontrado con el gol tras una sequía de 18 encuentros sin batir la portería rival, desde el pasado 25 de febrero), el Atlético de Simeone ya sobrepasa los cuatro años, desde el 22 de mayo de 2021, sin ser campeón.

Ni de Paul ni Julián ni Sorloth…

No fue el torneo del Atlético como colectivo, pero tampoco individualmente de muchos de sus jugadores. Y tres claves: Rodrigo de Paul, inspiración en una parte importante de este curso, pero apagado ahora, cuando apareció el Mundial de Clubes; Julián Alvarez y Alexander Sorloth, sus máximos goleadores (29 y 24 tantos a lo largo del curso antes del Mundial de Clubes, respectivamente), que se van de la competición sin pegada y sin goles.

“En este torneo no han tenido la suerte de poder hacer gol, pero estamos hablando de los dos que más goles han metido todo el año en el equipo, así que poco se les puede reprochar, porque son dos pedazos de jugadores”, advirtió el centrocampista Pablo Barrios, que termina el torneo como el inesperado máximo goleador, con dos tantos. Los otros dos fueron de un central, Axel Witsel, habitual suplente, y de Antoine Griezmann.

Ese gol rompe una sequía inaudita en el equipo del atacante francés, pero tampoco tapa el momento que ha vivido desde el pasado enero, con toda la importancia y dependencia que siempre ha tenido el Atlético de él. Dos goles ha marcado Griezmann en los últimos 24 partidos. Elegido para el once contra el París Saint Germain, es una de las decisiones más discutidas de Simeone en este Mundial de Clubes.

“Estamos cerca, pero nos falta un poco más”

El técnico argentino también queda en el foco, por el planteamiento ante el PSG, a la postre el partido clave que no logró abordar ni en la puesta en escena ni en el desarrollo ni en el desenlace. El encuentro que lo eliminó, realmente, pero no por los dos goles finales, sino por los cuatro en total. “No pudimos gestionar bien ese final de partido con un hombre menos”, valoró el entrenador tras el 1-0 al Botafogo cuando digería la eliminación este lunes.

“La frustración de no haber podido pasar. Hacer seis puntos en el grupo no era malo, pero al final terminó condenándonos el partido con el París, donde cualquier decisión (en referencia al árbitro Istvan Kovacs, con un gol anulado incluido con 2-1 en el marcador, con la expulsión de Lenglet, con la reclamación de una roja a Nuno Mendes…) siempre nos perjudicó”, expresó el preparador argentino en declaraciones a ‘Dazn’.

“En el partido de este lunes creo que, en el primer tiempo, tuvimos situaciones para poder adelantarnos. Tuvo el penal que revisó a una jugada anterior para no cobrar el penal que fue… Y más de lo mismo. Tranquilidad. Nosotros tenemos más que claro lo que tenemos que mejorar y todo esto nos ayuda para poder mejorar”, insistió Simeone.

“Hicimos los mismos puntos que el campeón de la 'Champions' y que el campeón de la Libertadores y nos quedamos fuera. Estamos cerca, pero nos falta un poco más”, volvió a decir Simeone en una idea repetida en los últimos tiempos. Quizá un mensaje para el nuevo curso, para la inversión en los nuevos refuerzos, para dotar al equipo de más potencia (Álex Baena, Jonnhy Cardoso…) para el futuro inmediato.

Menos de la mitad de ingresos de la Champions 2024-25

Ya enfoca a la nueva temporada, al inicio de LaLiga EA Sports a mediados de agosto, a la Liga de Campeones, a la Copa del Rey y a la Supercopa de España. Los cuatro frentes del Atlético 2025-26. La remodelación de la plantilla incluirá al menos cinco o seis fichajes, pendientes aún de completarse; ya hay salidas confirmadas (Axel Witsel, Reinildo Mandava y César Azpilicueta, por fin de contrato) y otras que vendrán (Ángel Correa, Rodrigo Riquelme…).

Al Mundial de Clubes, económicamente, por ingresos directos por incentivos deportivos, tampoco le ha sacado el Atlético el partido que esperaba: 22,6 millones de euros, a falta de las cifras oficiales de la competición, por su ingreso inicial por la participación en el torneo y sus dos triunfos en la fase de grupos. Las eliminatorias multiplicaban los premios de forma creciente y evidente.

Comparativamente, en la última edición de la Liga de Campeones, a falta de contabilizar el apartado que une los factores del mercado televisivo y el coeficiente UEFA, el Atlético logró 53,5 millones de euros sólo por su rendimiento deportivo, que concluyó en la polémica tanda de penaltis de la eliminatoria de los octavos de final contra el Real Madrid. Es más del doble que ahora en el Mundial.

Iñaki Dufour