Valladolid, 11 ene (EFE).- El rugido de los motores de miles de motocicletas ha vuelto a inundar las calles del centro de Valladolid en el desfile de banderas que abre el día grande de Pingüinos 2025, la concentración motera invernal más importante de Europa, pese a que la buena temperatura ha sido la nota dominante durante la mañana.

Miles de motos de todo tipo: desde las tradicionales Harley Davidson y Triumph, hasta vespas y motos de trial, pasando por grandes triciclos o motos de alta cilindrada, han salido del epicentro de este evento, la Antigua Hípica Militar y desde este año nombrada 'Pingüinos Arena' para dispersarse por cientos entre las calles de la capital vallisoletana.

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, ha ondeado la bandera de la ciudad antes de recibir de manera oficial a los motoristas en la acera de Recoletos, donde unos metros más allá ha tenido lugar la exhibición de FMX Free Style a cargo de los pilotos Maikel Melero, José Mincha y Francis Costelo (que conforman el llamado Team FLYXTREME) y Narcis Roca.

Un crisol sobre dos ruedas en la que se muchos motociclistas muestran con orgullo sus banderas de procedencia (de Ceuta, Melilla, Asturias y sobre todo de Castilla y León y España) y del que el presidente del Club Turismoto, organizador del evento, aspira a superar las cifras de años anteriores.

"Esperamos también empezar a acercarnos a los récords que hemos tenido otras veces porque ahora mismo calculamos entre 28.000 y 30.000 participantes", ha señalado en declaraciones a los periodistas el presidente de Turismoto, José Luis Navas, cifras que han superado las 42.000 hace dos años y que en 2024 sobrepasaron los 38.000 participantes.

Sin embargo, el buen tiempo ayuda a que muchos aficionados a las dos ruedas se apunten en el último momento, algo que a juicio de Navas "se nota" porque la ciudad "está totalmente sembrada de motos" y que a su juicio va a hacer que "todos los que se vayan sean embajadores nuestros".

A las motos también se unen los vecinos de la ciudad, que se han agolpado en las aceras, algunos desde una hora antes de la salida de la comitiva, para poder ver desde la primera línea la cientos de motos que en estos días también ocupan hoteles y consumen en los restaurantes y negocios de la Valladolid y su entorno.

A preguntas de los periodistas, el alcalde Jesús Julio Carnero ha destacado que este evento "es fundamental para Valladolid desde el punto de vista económico" ya que, tras las fiestas navideñas la concentración sirve para "amortiguar" la cuesta de enero y los vallisoletanos pueden disfrutar "de unas navidades que continúan gracias a Pingüinos".

El regidor ha augurado que el buen tiempo - cielos despejados y una máxima de 15 grados, según las estimaciones de la Aemet - se va a alcanzar "una cifra altísima" de participación, sin embargo ha preferido centrarse en el aspecto social de la concentración por la buena sintonía entre Pingüinos y la ciudad y porque "hay alegría, hay armonía y hay una felicidad enorme e inusitada".