El australiano Oscar Piastri saldrá primero este sábado en la prueba sprint del Gran Premio de Sao Paulo (Brasil), el vigésimo primero del Mundial de Fórmula Uno, en el circuito de Interlagos; donde McLaren aumentó la presión con el inglés Lando Norris -segundo en el certamen, a 47 puntos del triple campeón del mundo Max Verstappen (Red Bull)-, que, después de haber encabezado el resto de las tablas de tiempos, acabó segundo la cronometrada: dos puestos por delante del líder.

Piastri, de 23 años, dominó la 'mini calificación' al ser el más rápido en la tercera y decisiva ronda (SQ3), en la que cubrió -como todos, con el neumático blando- los 4.309 metros de Interlagos en un minuto, ocho segundos y 899 milésimas, 29 menos que su compañero inglés y con 254 sobre el monegasco Charles Leclerc (Ferrari), que saldrá tercero.

El español Carlos Sainz (Ferrari), que el pasado domingo festejó en México su cuarta victoria en la F1, arrancará quinto en el sprint -un puesto por delante de Max Verstappen-, que se disputará sobre poco más de un tercio del recorrido (24 vueltas, unos 102 kilómetros) de la carrera del domingo. En el que su compatriota el doble campeón mundial asturiano Fernando Alonso (Aston Martin), eliminado en la SQ1 con un AMR24 cada vez más renqueante, saldrá decimosexto; mientras que el mexicano Sergio Pérez (Red Bull) y el argentino Franco Colapinto (Williams), que cayeron en la segunda ronda lo harán desde la decimotercera y la decimocuarta plaza, respectivamente.

Verstappen ganó siete de las primeras diez carreras, pero no festejó ni un solo triunfo en las siguientes diez -en las que apenas subió cuatro veces al podio- y, en su afán de capturar un cuarto título seguido deberá seguir minimizando pérdidas, más aún cuando este viernes se confirmó que, por cambiar de nuevo el motor de su monoplaza, perderá cinco puestos en la parrilla dominical.

Para empezar, deberá hacerlo en el sprint de este sábado, que repartirá puntos entre los ocho primeros: ocho se llevará el ganador; siete, el segundo; y seis el tercero. Y así sucesivamente hasta el octavo: que sumará uno.

El astro neerlandés, que ganó los pasados dos campeonatos con un superioridad insultante, defiende los citados 47 puntos ante Norris, al volante de un McLaren dominante -que encabeza el Mundial de constructores- a falta de cuatro carreras y dos sprints, que otorgarán un tope de 120 unidades. Y el primer capítulo del cada vez más emocionante desenlace se escribe este sábado, en una carrera corta en la que el inglés George Russell (Mercedes) saldrá sexto, por delante del francés Pierre Gasly (Alpine) y del neozelandés Liam Lawson (RB), octavo en la calificación de este viernes.

Por la mañana, Norris había liderado el único entrenamiento libre del penúltimo fin de semana del certamen con formato sprint -el último será en Qatar-. Lando, que en México fue a festejar el triunfo de Sainz con su ex compañero español, había girado en 1:10.610, exactamente 181 milésimas menos que Russell y con 195 sobre otro compatriota, Oli Bearman, sustituto en Haas del indispuesto Kevin Magnussen. Al que relevará el año que viene, ya como piloto oficial, en la escudería estadounidense; y al que ya sustituyó en Azerbaiyán, cuando el danés se convirtió en el primer sancionado con una carrera de suspensión por haber perdido -a causa de varias infracciones- todos los puntos de su licencia.

Sainz, que en México festejó su segunda victoria del año, después de la de Australia -épica, apenas dos semanas después de haber sido intervenido de urgencia de una apendicitis en Arabia Saudí, donde lo sustituyó precisamente Bearman-, había sido séptimo en el libre, a 49 centésimas de Lando. Del que había quedado a seis décimas el doble campeón mundial asturiano, que, a causa de una infección intestinal -regresó a Europa para ser tratado por un especialista-, llegó un día más tarde al Autódromo Jose Carlos Pace, el circuito en el que festejó matemáticamente sus dos títulos (2005 y 2006).

Verstappen, que no quería dar pistas, abortando el que parecía su intento bueno, acabó decimoquinto, a un segundo y una décima de su principal rival en la lucha por el título. En una sesión en la que Colapinto se inscribió decimotercero, a poco más de un segundo de Norris.

El argentino, con sólo cinco pruebas disputadas ene la categoría reina, no para de recibir elogios de todo el mundo, incluidos los de 'Mad Max' y del séptuple campeón mundial inglés Lewis Hamilton (Mercedes), que saldrá undécimo en el sprint, en una jornada en la que homenajeará al mito local, Ayrton Senna, triple campeón mundial fallecido hace 30 años; con cuyo McLaren rodará en Interlagos.

'Checo', al que persigue la mala suerte este año, tampoco quiso mostrar sus cartas en el único libre del fin de semana y firmó el decimonoveno, a un segundo y 235 milésimas de Norris.

Alonso -decimosexto- y su compañero el canadiense Lance Stroll -decimonoveno-, al volante de un lamentable Aston Martin, cayeron en la primera ronda de la 'mini calificación' (SQ1); en la que Lando, el primero en bajar del '1:10' (1:09.477), volvió a ser, de lejos -con siete décimas sobre su compañero Piastri- el más rápido.

'Checo' pasó el corte con el quinto crono, un puesto por delante de Verstappen; con Colapinto noveno y Sainz, undécimo. Todos, como es preceptivo, con el neumático medio.

La SQ2, de nuevo con gomas medias, supuso el final de trayecto no sólo para el bravo piloto tapatío -subcampeón mundial el año pasado y cuestionado este curso- y el joven talento bonaerense, sino para el siete veces coronado Sir Leweis.

Norris volvió a ser el más rápido, de nuevo secundado por Piastri, que invirtió el orden del 'doblete McLaren' en el acto decisivo, en el que, con la amenaza de una lluvia que no llegó se rodó con el compuesto blando. En el que 'Mad Max' se inscribió cuarto, entre los dos Ferrari: el de Leclerc -ganador hace dos semanas en Estados Unidos-, que saldrá tercero; y el del talentoso piloto madrileño.

La prueba sprint abrirá la jornada del sábado, que se completará con la calificación para la carrera dominical, prevista a 71 vueltas, para completar un recorrido de 305,8 kilómetros.

Adrián R. Huber