14h08 CEST
22/04/2025
Madrid, 22 abr (EFE).- El líder del Mundial de MotoGP, el español Marc Márquez (Ducati), manifestó este martes que ojalá al final de la temporada se esté disputando el campeonato con su hermano, Alex, que actualmente marcha segundo en la clasificación.
En la presentación de una campaña de Estrella Galicia 0'0, uno de sus patrocinadores, en Madrid, Marc subrayó la importancia del momento que vive después de la racha de caídas y lesiones que comenzó en 2020.
"No son los 32 tacos, sino los momentos que he pasado de lesiones los que me hacen valorar el momento que estoy viviendo junto a mi hermano", indicó el piloto catalán, que agregó que en una gran premio apenas ve a Alex pero que luego se "ayudan deportivamente" en casa.
"Personalmente, por todo lo que he pasado, no me siento obligado a ganar. No me siento en deuda conmigo mismo", dijo Márquez.
Destacó asimismo la importancia del entorno a la hora de llegar a un nuevo equipo como ha sido su caso esta temporada al oficial de Ducati y, en este sentido, "la aprobación" de su familia y de su hermano.
Marc explicó que trata de evitar, tras ganar tres de las cuatro carreras disputadas, la palabra "superioridad", porque eso le lleva al exceso de confianza, tal y como le ocurrió en la carrera del Gran Premio de las Américas, en Austin, en Texas. Explicó que la última vez que tuvo la misma sensación que ahora en cuanto a su nivel de pilotaje y confianza fue en 2019, cuando también dominaba el Mundial de MotoGP, con ocho títulos en diferentes categorías.
"No soy mejor que el Marc de 2019. Soy diferente", declaró en una semana que terminará con el Gran Premio de España en el circuito Ángel Nieto de Jerez, y afirmó que todo "es una rueda" en la que ganas y los triunfos te van dando más y más confianza.
"Creo que estoy en la mejor situación siendo piloto oficial en el equipo oficial", manifestó Márquez, que, posteriormente, en declaraciones a EFE elogió la importancia del responsable jefe de Ducati, el ingeniero Gigi Dall'Igna, como organizador y la importancia de cómo un grupo pequeño de gente puede hacer crecer una empresa o una escuadra.
Reconoció que ahora no afronta la rivalidad dentro de su equipo, en este caso con el italiano Pecco Bagnaia, tal y como lo hubiera hecho cuando tenía 20 años.
Marc explicó a los periodistas que con las motos actuales y su desarrollo, neumáticos y aerodinámica es "imposible" que se den luchas "cuerpo a cuerpo" durante las carreras. "Adelantar es más difícil y arriesgado que antes", reveló el líder del Mundial, que añadió que le encantan las batallas "de tú a tú" y que espera que con el nuevo reglamento que entrará en vigor en 2027 se vuelva a las mismas.
El piloto catalán coincidirá a una hora de coche el próximo sábado con la final de la Copa del Rey, que disputarán su equipo, el Barcelona y el Real Madrid en el estadio La Cartuja de Sevilla. Señaló a EFE que tuvo la tentación de ir pero que, finalmente, permanecerá en Jerez descansando.
Reveló Marc que los azulgrana parten como favoritos, pero que no se fía en absoluto del Madrid.