Valencia, 20 nov (EFE).- El Valencia CF asume que el precio de acabar el Nou Mestalla se incrementará sobre sus últimas previsiones y así lo contempla en la búsqueda de un préstamo de hasta 325 millones para finalizar el nuevo estadio, una operación para la que pedirá permiso en su próxima junta de accionista de este mes de diciembre.

El club estableció en su día que el Nou Mestalla costaría 340 millones de euros, de los que ya ha abonado 170 y recientemente apuntó que el proyecto de ejecución para acabarlo ascendía a 140 millones, sin contar por ejemplo impuestos.

La entidad explica que la ampliación de la cubierta a todos los asientos y las mejoras que ha introducido en el proyecto, en parte para mejorar su explotación posterior, además de las subidas de precio de los costes, están detrás de ese seguro aumento.

Fuentes de la entidad, confirmaron que Goldman Sachs hace de intermediario para conseguirlo y explicaron que esperan que la cantidad final del préstamo sea menor y que sea a 20 o 25 años. El tipo de interés no está cerrado aunque se espera que sea menor del 7,13% que tiene el préstamo ‘puente’ de un año de 65 millones que se ha firmado con Goldman.

Con ese préstamo de hasta 325 millones el club tiene previsto pagar esos 65 millones de euros, acabar el Nou Mestalla, pagar el polideportivo de Benicalap que debe abonar al Ayuntamiento de Valencia, impuestos, puesta en valor de los restos arqueológicos de la parcela o pagar apertura de una cuenta de reserva, entre otros gastos.

Ese préstamo tendrá como garantías los ingresos que genere el nuevo estadio (incluidos conciertos o eventos) y el propio nuevo estadio. El club espera poder amortizar anticipadamente con la venta de Mestalla, del terciario o del edificio de oficinas. La entidad tiene tasaciones por más de cien millones por la parcela del actual estadio, que defienden que es única en la ciudad.

La entidad ademas espera que los nuevos ingresos que le generará el Nou Mestalla le permitan también bajar entre seis y ocho millones el pago anual por sus deudas, que este curso ha sido de unos 38 millones y que prevén que con el nuevo estadio en funcionamiento sea de 30 o 32 millones.

La entidad asegura que, en cualquier caso, podría retomar las obras del Nou Mestalla, algo que debe hacer antes de enero sin tener ese préstamo concedido porque tiene reservados 80 millones del dinero que recibió por el acuerdo entre LaLiga y el fondo CVC.

La entidad tiene ahora mismo una deuda neta acumulada de 284 millones, a la que hay que sumar un préstamo de 121 ya suscrito y este de hasta 325 que espera cerrar en las próximas semanas.